Las empresas manifiestan la creciente dificultad de atraer, vincular y motivar a los mejores profesionales.
Actualmente, el reto para las empresas, en una situación económica muy delicada, es integrar un nuevo modelo de relación laboral en torno al principal protagonista: el empleado. En Compensa Capital Humano, tenemos una estrategia para conseguir este objetivo y la llamamos el Compromiso Digital:
- Debemos identificar qué elementos de la Propuesta de Valor de la Organización (PVO) son válidos para la atraer, motivar y retener a cada uno de nuestros profesionales y qué elementos no lo son.
- Maximizar el valor que percibe el empleado, como por cada uno de los elementos con los que le retribuye la Organización y en su conjunto, por su decisión de trabajar con nosotros.
- Reinventar la experiencia de cada profesional, digitalizar y redefinir los roles de determinadas personas de la organización para responder de forma proactiva y rápida ante cualquier solicitud de los profesionales en el ámbito de su PVE, sobre la base del análisis de datos veraces y precisos.
- Optimizar el retorno de la inversión de todos los elementos de la PVO a través del análisis de la percepción económica de cada profesional en comparación con los costes directos e indirectos a través de la digitalización de los procesos existentes.
Estas son las claves
Pero, a partir de estos grandes hitos que componen la estrategia del compromiso digital, podemos plantear una serie de claves que permitan atraer y retener el talento en nuestras organizaciones:
- Conocer a nuestros colaboradores. Quienes son y qué situación laboral y familiar tienen. No tiene las mismas necesidades un empleado joven, soltero, sin hijos y que trabaja en el centro de la ciudad que un empleado de mediana edad, separado, con hijos y que trabaja en un polígono industrial.
- Analizar toda nuestra Propuesta de Valor para conseguir una PVE personalizada, que responda a las necesidades de cada uno de nuestros colaboradores.
- Comunicar esta Propuesta de Valor para que todos los colaboradores la conozcan y puedan beneficiarse de ella.
- Involucrar a los mandos intermedios en el conocimiento de la PVE. Ellos son quienes conocen más cerca a nuestros colaboradores y quienes pueden ofrecernos datos para su continua mejora.
- Analizar la satisfacción de los colaboradores hacia los beneficios corporativos o medidas para la integración de la vida laboral y familiar que componen nuestra PVE. Estos datos nos permitirán tomar decisiones a tiempo para aumentar los índices de felicidad de nuestros colaboradores y que estos maximicen la percepción económica de la PVE.
- Digitalizar los procesos para que la relación entre el colaborador y la empresa sea fluida, se elimine la burocracia y se facilite el uso de la PVE.
- Obtener datos del uso de la PVE para la toma de decisiones estratégicas en busca siempre de la mejor experiencia para el empleado.
- Democratizar la retribución, permitiendo que sea cada colaborador quién estructure su retribución y elija qué parte de su salario quiere destinar a la retribución flexible para incrementar su neto disponible.
- Obteniendo como organización un retorno de la inversión positivo que permita seguir invirtiendo en beneficios para los colaboradores.
- En definitiva, pagar mejor. Cambiar nuestras políticas retributivas para alcanzar la eficacia y eficiencia retributiva y corporativa.
Jaime Fontes,
Director de Negocio en Compensa Capital Humano, del grupo Howden
